Ante muchas personas nos ponemos trajes que nos hacen diferentes, a veces para evitar que nos conozcan y puedan hacernos daño.Con otras personas empleamos una máscara.
Esta máscara es suficiente, porque es un trato superficial que no se le da la oportunidad de descubrir nada más sobre nosotros, sólo les dedicamos un instante fugaz en nuestra vida para luego dar media vuelta y cada uno por su lado.Pero hay personas que consiguen llegar a ti. Personas que con tiempo les brindas tu confianza. Ante estas personas no nos podemos ocultar y no hay máscaras que valgan.
Esta máscara es suficiente, porque es un trato superficial que no se le da la oportunidad de descubrir nada más sobre nosotros, sólo les dedicamos un instante fugaz en nuestra vida para luego dar media vuelta y cada uno por su lado.Pero hay personas que consiguen llegar a ti. Personas que con tiempo les brindas tu confianza. Ante estas personas no nos podemos ocultar y no hay máscaras que valgan.
En definitiva esta vida es un juego de máscaras pero al final siempre acabas quitándotela, quieras o no.
Lo mas importante es NO QUERER ponerte la mascara ante alguien. Hay que ser valiente y confiar en esa persona para mostrarnos como somos.
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